Buenos días a todas y todos,
Después de haber visto el “renacer” en favor del asombro, me he decidido a escribir y presentarme.
Siempre me ha gustado la magia, pero jamás habría imaginado que sería capaz de aprender.
Hace casi cinco años fui padre, y al poco tiempo quise aprender algún truco para poder hacerle a mi hija cuando fuera más mayor, y di con algún video de monedas de Julio, a quien ahora considero el profesor. Me encantó, me fascinó y me enganchó.
Empecé con una desaparición de moneda en la mesa, desaparición de moneda con un marcador y a partir de ahí compré en la tienda mis primeras monedas de dollar y medio dollar.
Ese primer video me llevó a un mundo que siempre había querido conocer y nunca me había atrevido. En estos años he hecho el curso gratuito, el Cómo ser un mago 1.0, Cómo ser un mago 2.0, Cartomagia de bolsillo, Magia con objetos cotidianos, Levitación, Clásicos de la magia y, si no me dejo ninguno, un master de mentalismo del Top Secret. No hay día que no ensaye ni que sea con una baraja.
Estoy totalmente de acuerdo cuando Julio habla sobre el poder del asombro, para poder crear ilusión y momentos mágicos. En un mundo de estrés y personas amargadas, la magia es puro aire. Es una sonrisa, es una boca abierta, es un ratito de volver a ilusionarse. Es, de verdad, magia.
En este tiempo he hecho magia a amigos, familia, cumpleaños, colegio de mi pequeñaja, y sobre todo a mi hija. Incluso una vez, una mañana de lluvia fuerte, en un cubierto, me atreví a hacer street magic a un hombre que estaba solo cobijándose de la tormenta. Era un temporero de la fruta, migrante, y de verdad que le cambió la cara. Me pidió la baraja y me enseñó un juego que hacía de niño en su país. Lo volví a ver y me dio las gracias por haberle hecho recordar su infancia, además de pedirme otro juego con el que logré sorprenderlo. Sorprenderlo a él, y sorprenderme a mí por haber sido capaz de acercarme a una persona totalmente desconocida para hacerle magia.
Volvamos a mi hija, que fue el motivo de mi idea de aprender. Fui en época la guardería a hacer algunos juegos a los pequeñajos. 2 veces. Demasiado pequeños,pero aún así conseguí tenerlos enganchados a los juegos de esponjitas y alguna desaparición de monedas (yo era muy novato, pero para aprender hay que hacer y salir. También tengo una especie de miedo escénico, pero siempre me he atrevido a salir y hacer cosas). Alguno de esos niños llegó a casa ilusionadísimo.
Ahora mi hija es más mayor, y me pidió a mí y al colegio que fuera a hacer magia. La escuela encantada y me organizó una mañana de viernes. La semana pasada concretamente. Preparé mi maleta (la mía y la suya, porque tenemos cada uno la nuestra), y preparé un pequeño escenario y la puesta en escena. Creo que estuvimos casi tres cuartos de hora disfrutando, con una rutina tras otra bien ligadas. Una canción con juego incluído, rutina de bolígrafo, monedas, cuerda hindú, desaparición y transposición de pañuelo, cambio de color de pañuelo, carta rota y recompuesta, y un largo etcétera de juegos. Y para terminar hice el juego de The bite. Siempre es un TOP, y me inventé una historia/presentación contra el bullyng.
Puedo decir que tanto los niños, como las profesoras, se quedaron impactados todo el espectáculo en general. Y eso, es magia de verdad. Ver a niños disfrutar del asombro, saltando de alegría, y abrazarse después de algún juego. Ver a las profes alucinar en colores también mola mucho, todo hay que decirlo.
Total, que me quedo sin tiempo que llegaré tarde a trabajar, y además soy consciente de la chapa considerable que os he dado. El asombro es increíble y necesario. Me parece muy acertada la nueva etapa de Magia y cardistry, y que por eso aquí os he contado mi historia. Espero que os guste.
Por cierto, en mi maleta pone “El Magponpunk” i en la de mi hija “la maga chimpom”
A mí me gusta el punk y antes de nacer mi hija hacíamos la broma de que en el coche me pediría música punk, y me diría “papá pon punk”, y de ahí el nombre. Porque la magia surgió por y para mi hija, aunque esté llegando más gente de una manera sorprendente y súper bonita.
Saludos y magia. A por el asombro del mundo!